Denominamos diastema a los espacios que en ocasiones pueden aparecer entre piezas dentales. En los dientes definitivos estas separaciones entre dientes pueden ser bastante antiestéticas, pero en piezas temporales son una buena señal, ya que significará que existe espacio suficiente para el recambio.
Así cuando en un paciente infantil, que todavía no ha iniciado el recambio dental, observamos unos incisivos bien alineados, sin espacios entre ellos, podemos empezar a pensar que en un futuro puedan existir problemas de apiñamiento. Es muy típico el comentario de muchos padres indicando que les extraña que su hijo/a tenga los dientes tan "torcidos" si los de leche estaban bien rectos y alineados. Cuando el profesional les pregunta si existían espacios entre ellos, los padres comentan que estaban bien rectos y juntos.
Esto solo es una de muchas señales que puede hacer sospechar al profesional de un problema futuro. Aun así, habitualmente no suele servir para instaurar un tratamiento temprano. Los profesionales prefieren empezar a trabajar cuando este recambio ya se ha iniciado por ser más predecible y el trabajo suele ser más fácil en un niño un poco más mayor con algunas piezas definitivas.
En la siguiente imagen observamos la situación ideal: unos incisivos temporales bien alineados y separados entre ellos. Seguramente en este caso no haya problemas de apiñamiento, aunque esto no descarta algún otro tipo de maloclusión. |